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Os dejamos aquí los nuevos outtakes y una adelanto de la entrevista:

Así que, ¿estás lista?

Siento que ahora mismo estoy en el ojo de huracán. Hace poco comencé a limpiar todo como si estuviese loca, y empecé a pensar que es mi ansiedad por la película. Creo que es un poco como, “simplemente estoy limpiando la manilla del frigorífico. La película no se estrena. Voy a limpiarlo hasta dejarlo impecable y mi vida no cambiará. 

Es aterrador. Siento que tengo un billete para irme a otro planeta y me estoy mudando allí, sin vuelta atrás, y no sé si me va a gustar ese otro planeta o si tendré amigos. Es desalentador.

Pero pensaste sobre todo esto antes de aceptar el trabajo, ¿verdad?
Me di a mí misma tres días. Sabía de haber leído los libros que me encantaba “Los Juegos del Hambre“. No sabía si valía la pena cambiar mi vida por ello. Ahora mismo, estoy en un lugar pacífico. La gente que me solía ignorar en las fiestas, ahora son agradables y me besan el culo. Pero no hay nadie apostado fuera de mi casa. Quería asegurarme que cuando dije que sí, no me arrepentiría. Y no me arrepiento. Hubiese dicho que no por haber estado asustada, y entonces hubiese sido una actriz amargada diciéndole a mis nietos, “Soy la que rechazó eso”.
Jennifer también comparte sus pensamientos originales sobre que “Los Juegos del Hambre” fuese llevado al cine.
“Cuando escuché que estaban haciendo la película, pensé, “oh, es genial el que vayan a arruinar otro libro genial”. Pero entonces conocí a Gary (Ross, el director) y él era increíble y brillante y un genio”.